Fin de año

Viene de acá

Tres semanas más tarde…

- Hola mi amor, ¡tengo good news, gordi.!
- Hola Vale ¡decime que la compañía de seguros te aprobó el pago de la póliza del flaco, por favor! Es lo único que me…
-¡Yes! ¡Yes! Yes, gordi…vamos a cobrar la póliza, a más tardar en tres meses.
- Puta madre, eso si que es una buena noticia. Entonces ¿nadie sospechó nada? ¿los investigadores, nadie?
- No, gordi, nadie. ¡Podemos decir que nos mandamos el crimen perfecto!
-Sh callate, loca, a ver si nos escucha alguien. Así que el muy hijo de su madre del flaco nos arruinó las fiestas de fin de año con el velorio pero valió la pena. ¡Somos ricos! Mi amor, sos una maestra. Decime una cosa, me quedé con la intriga ¿Cómo hiciste para convencerlo al pelotudo de tu marido de que nos haga la bromita de presentarse en la fiesta  disfrazado de ladrón y que le apuntara a mi suegro con un revólver de juguete?
- Ay, gordi, vos lo dijiste, el flaco era un pelotudo, se tragaba cualquier verdura que yo le dijera ¿Qué te extraña? ¿Y vos? ¿Cómo hiciste para que tu suegro tuviera un revólver en serio en el bolsillo y se animara a dispararle al supuesto ladrón?

- Fácil, mi amor. Hacía dos días que habían asaltado a la viejita de al lado. Le llené un poco la cabeza al viejo y andaba con el chumbo en el bolsillo para todos lados. Además como fue milico era lo más probable que le disparara al chorro. ¡Pero que bien nos salió, guachita, que bien!
- Miami nos espera, gordi. ¡la gran vidurria nos vamos a dar! Aguantarlo al flaco hasta que se hizo el seguro de vida fue un horror, pero valió la pena.
- Hablando de seguro de vida, voy a llamar al banco. Muack. Muack. Nos vemos mañana.
- Chaucito mi cielo, te amo. No veo la hora de estar los dos juntitos en Miami, sin tener que andar escondiéndonos.

Tres meses más tarde…

- ¿Tenés todo, Vale? ¿Pasaporte, documentos, las tarjetas de crédito, todo?
- Si, gordi, dale. Salgamos de una vez que se nos va a ir el avión.
- Pero ¿llevamos todo? No se, tengo una sensación de que me falta algo, Valeria.
- No te falta nada, gordi, dejá de paranoiquear y vamos al aeropuerto.
- Si, vamos.
-Agarrá por la costa y después por Acevedo hasta Camet, no agarres Constitución porque hay mucho tránsito.
- ¿Te parece? Mirá que por Acevedo es peligroso a esta hora, a ver si todavía nos asaltan.
- ¡Y dale con la paranoia! La Constitución es más peligrosa porque a esta hora salen todos los mamados de los boliches, ¿captás?
- Tá bien. Prendeme un pucho. Tengo como una cosa en el estómago, viste, como un mal presagio. ¿Será la culpa?
- Má que culpa ni culpa, son los sánguches de chorizo que te comiste anoche, dale, no jodás, gordi.
- Uhh mirá, mirá…¡hay un auto atravesado ahí adelante! ¿Y ahora que hago?
- Pará, gordi, pará! Es una mujer sola que pide ayuda, no podemos dejarla tirada.
- Tenés razón, paremos.
- ¡¡Ahora Moncho, dale, ahora, ¡dispará!!
- ¡Valeria! ¡mi amor! ¡que decís! ¿Quién es el Moncho? ¿A quien le…? Ahhhh! Hija de puta…hija de p…¡me hiciste lo mismo que al fl….
- Infeliz. Pedazo de infeliz. Si serás pelotudo. Vamos Monchito, mi amor, apurate que se nos va el avión.

Fin